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Aquí te dejaremos dos rituales que tienen un mismo fin: Atraer la suerte a tu existencia.

Hay quienes creen que la suerte, como dice el dicho, es loca, al que le toca le toca. Este criterio parecería expresar que hay una especie de casualidad en la buena o mala suerte.

Para el místico o esotérico la suerte es producto del karma y no hay en ella nada de casualidad.

Hay personas que tienen más suerte que otras, y esto es producto de acciones que han realizado en otras vidas, también se cree que incluso la forma de actuar en esta vida influye en la buena o mala suerte.

Vistas las cosas así, pareciera que no hay nada que se pueda hacer para cambiar la suerte.

Sin embargo la energía positiva actúa como cualquier otro tipo de energía, es decir toda energía tiene dos polos y se mueve de acuerdo a la ley de atracción. Los polos iguales se rechazan , los contrarios se atraen.

Lo que hacen los rituales es convocar un tipo de frecuencia para que esa energía de la suerte se acerque a nosotros.

Es decir que por medio de un procedimiento mágico haremos que un determinado tipo de frecuencia se acerque a nuestra vida.

Hay muchos tipos de rituales y los de la suerte son aquellos que muchas veces debemos repetir. La repetición en este caso se hace para afirmar esa frecuencia que queremos atraer. Con el tiempo la mala suerte irá desapareciendo y nos encontraremos con un cambio en nuestra vida.

Se dice que la suerte puede cultivarse, es decir podemos, por medio de la instalación de un tipo de frecuencia en nuestra vida, cambiar nuestro destino y comenzar a vibrar más elevadamente. De esta forma la suerte vendrá automáticamente a nosotros.

También es cierto que a partir de esto podremos cambiar, de alguna forma, nuestro karma o por lo menos mitigar los acontecimientos negativos que podrían sucedernos si seguimos con una mala frecuencia.

Para tener suerte no sólo hay que hacer estos rituales sino intentar cultivarnos en energías positivas, esto es buscar encontrarnos de la mejor manera posible. Muchas veces esto no es posible porque las circunstancias pueden ser muy negativas, sin embargo debemos aprender a modificar nuestro estado mental.

Esto se hace de muchas maneras, la primera es aceptando la realidad de las cosas que no podemos cambiar y meditando en su opuesto. También son muy importante los alimentos mentales y espirituales que introducimos en nuestro espíritu.

La realidad puede ser muy difícil a veces, pero es posible que además estemos alimentándonos de energías muy negativas.

El cuerpo se alimenta por la boca pero el espíritu se alimenta por los otros sentidos y principalmente por los ojos. Lo que miramos puede realmente aportar para que entremos en la negatividad. Por lo tanto es importante que intentemos desterrar aquellas imágenes que sólo nos aportan tristeza o sentimientos desagradables.

Algunas preguntas que puedes hacerte con respecto a este tema:

¿Es posible con un ritual atraer la buena suerte o es tan sólo un mito?

Como dijimos anteriormente en esta misma nota es posible cambiar la suerte a partir de un ritual.

Claro que deberás seguir los pasos adecuadamente como se indican aquí y por otra parte debes tener en cuenta que la fe tiene un real efecto. Es decir que no se trata sólo de hacer el ritual sino de hacerlo con fe y con una energía positiva.

El ritual es una forma sagrada, pasos que se dan para la convocatoria de una energía que es en este caso, positiva.

Los rituales fueron practicados desde tiempos primitivos.

Hay rituales muy complejos y otros muy simples pero casi todos tienen una serie de pasos que deben ser efectuados en cierto orden.

Ese orden es el que propicia el acercamiento de una determinada energía. Si procedemos adecuadamente es posible que tengamos éxito.

La suerte puede ser convocada.

¿Por qué tengo siempre mala suerte, puedo cambiar esto?

Por supuesto que podemos cambiar nuestra mala suerte.

En realidad esta mala suerte es tan sólo una energía que se ha instalado en ti.

Esta instalación de determinada energía es producto de un tipo de frecuencia que tú cultivas sin darte cuenta. La forma de cambiar esto es cambiando eso que cultivas.

Los rituales que te dejamos aquí lo que hacen es la convocatoria inmediata de esta energía positiva, sin embargo es posible que tú puedas atraer la buena suerte aún sin hacer ningún ritual, si te dedicas a cambiar internamente.

Hay una negatividad que uno convoca por medio de los pensamientos. Esta forma de pensamiento negativo está instalada en nuestro inconsciente y por medio de ella atraemos esas fuerzas negativas.

Lo primero que debemos hacer es identificar a los pensamientos negativos y luego intentar desarraigarlos.

La forma de sacar los pensamientos negativos de nuestra vida no es intentando que ellos no aparezcan sino remplazándolos por otros pensamientos. Esos otros pensamientos tienen que ser la contraparte de los pensamientos negativos.

Por ejemplo, es común que si una persona tiene miedo a los perros termine mordida por uno de estos animales, el miedo hace que esta persona piense todo el tiempo en que el perro la va a morder. Lo que hay que hacer en este caso es reemplazar ese pensamiento por otro, debemos visualizar que estamos seguros y que caminamos muy tranquilos por la calle. Este pensamiento ayudado por una visualización hará que la espiral de pensamiento negativo no se active.

Haciendo estos pequeños cambios de pensamiento lograremos poco a poco armonizarnos y por lo tanto llegará un momento en que la suerte cambiará.

2 rituales para atraer la suerte a tu vida

Ritual con sal y velas negras para la buena suerte

Este es un ritual que tiene como elementos principales a la sal y a dos velas negras.

Elementos a utilizar:

Dos cucharadas de sal gruesa
Dos velas negras
Dos carbones que se utilizan para sahumar
Incienso en polvo
Un papel blanco con la forma de un triángulo de lados iguales
Una lapicera roja
Un plato de metal para poner el carbón
Un cronometro o algún sistema para controlar el paso del tiempo.

Procedimiento:

Este ritual se hace en una mesa pequeña cuadrada y con espacio alrededor para que te puedas mover.

Tomar el papel triangular y ubicarlo en el centro de la mesa. Apagar las luces y encender las dos velas poniendo cada una de ellas en la base del triángulo, en cada esquina con la punta del mismo oponiéndose al lugar que tu estas. Al encender las velas dices: “Por esta luz todo vuelve al centro de la armonía, así sea”.

Luego das media vuelta a la mesa de manera que quedes frente a la punta del triángulo. Tomas el plato y pones sobre él el carbón. Lo enciendes, al hacerlo dices la siguiente frase: “La chispa hace que todo lo negativo huya”.

Luego tomas el incienso y lo arrojas lentamente sobre el carbón, al hacerlo dices: “Aquí se volatiliza la oscuridad, aquí se va la negrura y toda la traba se destraba”.

Luego esperas a que las velas estén por la mitad. No hace falta que te quedes frente a ellas. Cuando se consumieron a la mitad tomas la lapicera y vas a dibujar una raya en cada lado del triángulo. Cuando haces la raya, cada vez que la dibujas dices la palabra “Ahora”.

Luego esperas unos segundos y tomas la sal, la pones en tu mano izquierda y la arrojas sobre el carbón lentamente. Al hacerlo dices la siguiente frase: “Se sella, se sella, se sella”. Repites esta frase varias veces. Ten cuidado de no quemarte con las chispas que salen de la sal al caer en el carbón. Fíjate que el carbón debe estar bien encendido.

Esperas a que el carbón se apague y las velas se consuman. Una vez que esto sucede sacas las velas y el carbón y lo arrojas a la basura. Pones el plato al costado y tomas el triángulo. Lo agarras con la mano izquierda y lo sostienes así dos minutos. Luego lo pasas a tu mano derecha y lo sostienes también dos minutos. Tienes que cronometrarlo. Luego con las dos manos tomas el triángulo de papel y lo sostienes de manera que una de las puntas quede apuntando a tu pecho y dices: “Así es, hoy comienza, alegría y bienestar”.

Dices esta frase bien fuerte una sola vez. Luego guardas el triángulo en tu mesa de luz.

Eso es todo. Puedes volver a hacer este ritual luego de una semana. Muy efectivo.

Ritual con agua para traer la suerte a tu hogar u oficina

Sabemos que a veces el hogar o la oficina poseen ciertas energías negativas que se van acumulando. Estas energías atraen la mala suerte, por lo tanto este ritual lo que hace es limpiar esas energías negativas y atraer las positivas. Puede hacerse una vez por semana, es preferible hacerlo los días sábados. Es muy simple.

Elementos a utilizar:

Un jarro grande de boca ancha de agua pura
Un poco de azúcar, dos cucharadas grandes
Una vela de color blanco
Dos ramas de romero fresco del tamaño de 10 cm. aproximadamente.
Una flor blanca en perfecto estado, si es una rosa mejor

Procedimiento:

Poner la vela sobre la mesa, delante de ella poner el jarro de boca ancha con el agua. Encender la vela y decir la siguiente frase: “Por medio de esta luz este sitio comienza a armonizarse, no hay mal aquí, solo bondad y bienestar, paz y armonía”.

Esperas aproximadamente 10 minutos. Luego tomas las dos ramas de romero, una en cada mano. La que tienes en la mano izquierda vas a ponerla sobre el lado derecho del jarro, sobre la mesa. Cuando colocas la rama en el lado derecho dices: “Por este lado no penetra el mal”.

Luego tomas la otra rama que está en tu mano derecha y la pones en el lado izquierdo. Dices también la frase: “Por este lado no penetra el mal”.

Luego tomas el azúcar con la mano izquierda y comienzas a arrojarla sobre el agua. Cuando lo haces dices las siguientes palabras: “No hay problemas aquí, todo se torna dulce, nada se antepone a la felicidad”.

Luego esperas 10 minutos en silencio.

Por último, tomas la flor blanca y la pones delante del jarro con tu mano izquierda, al hacerlo te paras en forma derecha, agachas la cabeza y dices: “Me pongo al servicio del bien, todo este lugar se armoniza por esta actitud”.

Esperas así a que las velas se consuman. Una vez sucedido esto tomas la flor y las ramas de romero y las estrujas para achicarlas y ponerlas dentro del agua.

Luego tomas el resto de las velas y también lo pones dentro del agua.

Por último haces un pozo en la tierra y tiras allí todo lo que está dentro del agua. Al hacerlo dices: “Por medio de este acto desaparece para siempre lo negativo”.

Realizado esto el ritual se da por finalizado.

Es conveniente que el jarro sólo lo utilices para hacer hechizos o rituales y no para lo cotidiano.

Este ritual hará que la energía de la casa o el hogar se armonicen y por lo tanto se aleje la mala suerte y venga la buena suerte. Esperamos te sirva.