Aquí te dejaremos un hechizo para el amor que se hace con sahumerio.
El sahumerio es una mezcla que se realiza con distintos elementos vegetales y que al ser quemada se transforma en humo. Este humo que puede tener distintas densidades es el que produce un efecto directo en el ambiente. Sahumar no es más que hacer que el humo que se produce se volatilice.
Generalmente en occidente no se tienen muy en cuenta los efectos que puede hacer el sahumerio y se utiliza más por su fragancia que por su directa modificación de la energía de un lugar.
Sin embargo en oriente es una sofisticada mezcla que se utiliza para cambiar el campo vibratorio de los lugares y también de las personas. Por lo tanto hay muchas mezclas y cada una de ella tiene una función específica. Esto lo saben en todos os países orientales y por tal razón es que los mejores sahumerios vienen de allí.
Sin embargo hay que saber que los pueblos originarios de los distintos países que no son orientales, también usaban mesclas para sahumar. Es el caso de muchas tribus de América del norte y del sur.
Los elementos de la naturaleza cuando se queman producen un humo especial que compenetran la materia y cambian el campo vibracional de aquello que tocan. Es por esta razón que por regla general el sahumerio se usa con un sahumador, recorriendo los distintos puntos de una casa o del sitio que se quiera sahumar.
En el caso de que un sahumerio se utilice en un hechizo, no hace falta trasladarse en el espacio pero si hace falta que el humo del sahumerio toque a la persona o a aquellos que hacen el hechizo.
Algunas preguntas que puedes hacerte con respecto a este tema
¿Es posible realizar un hechizo o es tan sólo una superstición?
Tanto los hechizos como los rituales y otros actos mágicos no son más que una forma de convocatoria energética para que algo que nosotros queremos se haga posible.
El hechizo es la puerta que se abre para darle lugar a las energías que nosotros convocamos para un fin determinado.
Los hechizos no son meras supersticiones, aunque la fe tiene importancia, un hechizo es la convocatoria a fuerzas energéticas que producen determinado efecto tanto en el entorno como, en algunos casos, en personas que nosotros elegimos.
Claro que para que este hechizo o ritual pueda tener su efecto debemos seguir los pasos adecuados y además cultivar alguna forma interna de orden para que ese orden pueda trasmitirse a la acción que vamos a realizar: una acción mágica.
Muchos creen que un hechizo es algo que está fuera del ámbito de las personas comunes y que sólo los brujos pueden realizarlo. Sin embargo cualquier persona puede realizar un hechizo si sigue las instrucciones y si lo hace con la intención adecuada.
En magia la intención es lo primero, por eso se insiste en muchos tratados de esoterismo que hay que cultivar una correcta actitud interna. Hay que tener fe y una intención muy específica.
Por otra parte hay que cultivar cierta pureza para que el acto mágico se traduzca en un acto de magia blanca y no en magia negra. Esto es importante: La persona que hace un hechizo tiene que estar libre de las sombras de los celos y la envidia, para no contaminar con esas emociones negativas el acto simple de hacer un ritual o un hechizo.
Estando libre de emociones negativas y siguiendo las instrucciones se encontrará con que es muy fácil realizar un hechizo y lo que es mejor: podrá ver los resultados al poco tiempo.
¿Se puede hacer un hechizo de amor y que dé buenos resultados?
Sí, es posible, porque el hechizo de amor tiene la particularidad de ser el que más energía de deseo posee, ya que el amor es muy movilizaste e esas energías tan poderosas. Es decir que hay energías internas que se ponen en juego que son muy potentes y que si sabemos utilizarlas para nuestro hechizo pueden ser muy beneficiosas, algo así como un impulso renovado, algo que puede darnos fuerzas extras.
Saber utilizar este impuso es algo que podemos aprender. Con el tiempo podremos saber manejar esa energía y así utilizarla correctamente.
Por otro lado es bien sabido que el amor es algo que realmente no puede controlarse. Quién ame a otra persona muchas veces tiene que conformarse con una negativa, ya que no se puede obligar al otro a que nos ame. Como dicen muchos poetas: el amor es un juego azaroso, casi siempre amamos a quien no nos quiere.
Sin embargo el hechizo de amor es una forma primaria de abrir una puerta para que el amor entre y exista una pequeña posibilidad de que esa persona que anhelamos junto a nosotros, se atreva a hacer un acercamiento.
Quien hace un hechizo de amor es porque sabe que ese amor puede ser complicado. O bien siente que puede ser rechazado o simplemente está seguro que la otra persona no lo ama. Por lo tanto cuando se hace algo mágico es porque sabemos que la situación normalmente no nos favorece. También en algunos casos es porque somos muy tímidos para hacer acciones concretas que consubstancien ese amor.
Antiguamente sólo las mujeres hacían hechizos de amor porque ellas eran socialmente las que no podían avanzar sobre el hombre, ellas podían insinuar un acercamiento pero no podían acercarse directamente, no podían proponer. Con el tiempo esto fue cambiando para bien ahora las mujeres pueden invitar a un hombre a salir, algo impensado hace 50 años atrás
Sin embargo muchas veces el otro no nos quiere o simplemente no le gustamos. El hechizo de amor puede ir cambiando estas condiciones porque lo que hace es modificar la energía negativa que rodea a esa situación.
De hecho un hechizo de amor lo que hace es cambiar la energía de la persona que queremos enamorar. Esa energía es un cúmulo atómico de ciertas condiciones que al ser modificado por otra energía puede comenzar a cambiar para el lugar que nosotros queremos: el de la apertura sensible que produzca un acercamiento.
Este procedimiento puede ser tomado como una fábula o un mito, pero lo cierto es que los brujos y hechiceros de la antigüedad lo conocían bien. Las personas somos influenciables, la energía que se pone en juego en un hechizo hace que esa influencia puede llegar de la forma adecuada por medio de un método practicado desde hace cientos de años.
Entender esto es entender que es posible influenciar negativa o positivamente a alguien. En el caso de un hechizo de amor estamos influenciando para que el otro abra, su mente, su corazón y también su parte sexual.
Estos tres aspectos se ponen en juego en un hechizo de amor y corresponden a tres zonas del ser humano. La cabeza, el pecho y los órganos sexuales. Y es por esta razón que un verdadero hechizo apelará a estas tres “secciones” del humano para despertar las energías correspondientes a estos centros energéticos.
Este conjunto de energías que intentan modificar al otro pueden ser puestas en movimiento por medio de un acto de magia blanca o por un acto de magia negra. Lo que distingue una magia de otra es la intención con que está hecho el hechizo. Es por eso que insistimos que para hacer magia blanca debe haber un grado de pureza tal que la persona que lo hace se encuentre libre de celos y envidias. Algo que en cuestiones amorosas muchas veces es difícil de lograr.
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Hechizos de amor con sahumerio
Hechizo de amor con incienso y rosas rojas para atrapar a un hombre
Este hechizo de amor debe hacerse en luna llena , de esta forma tendrá mejores efectos. Contiene dos elementos principales: el incienso y las rosas rojas.
Elementos:
- De 10 a 15 gramos de incienso en polvo.
- Un sahumador.
- Un carbón para sahumar.
- Tres rosas de color rojo
- Un papel de color blanco.
- Una vela negra.
- Un lápiz labial de color rojo.
Procedimiento
El procedimiento es sencillo pero debes seguir los pasos como los indicamos.
La habitación debe estar en penumbras. La mesa debe tener un pequeño altar con una manta o paño rojo. Y debes estar sentada de manera que la parte superior de tu cuerpo pueda ser tocada por el humo del sahumerio.
Primero debes poner la vela negra sobre la mesa y la enciendes. Cuando lo haces dices la siguiente frase en voz alta tres veces: Convoco a toda la luz, que se abra y se multiplique y atraiga.
Luego de encender la vela debes tomar el sahumador, poner el carbón dentro y encenderlo. Al hacerlo debes decir las siguientes palabras: Por medio de este fuego que se enciende, enciendo el amor de él. Está libre pero libre me quiere y me desea, el fuego despierta su fuego.
Luego tomas el incienso y lo arrojas sobre el carbón poco a poco con la mano izquierda. Al hacerlo dices las siguientes palabras: Este amor se eleva y viene a mí, se acerca, se acerca.
Repites la frase tres veces mirando fijamente el humo que sale de sahumador y tratando que envuelva la parte superior de tu cuerpo. Debes cerrar los ojos mientras dices la frase y sentir que el humo hace su efecto sobre ti.
A continuación tomas el papel y escribes el nombre de la persona que quieres enamorar tres veces, separándolo con un pequeño corazón. Lo escribes con el lápiz de labio. Ten un papel lo bastante grande para que puedas hacer esto.
Luego pones ese papel sobre el humo que sale del sahumador, lo sostienes con la mano izquierda. Lo sostienes por lo menos dos minutos. Mientras el humo impregna el papel debes decir: La energía se afianza y él me ama.
Repites la frase todo el tiempo que tienes el papel sobre el humo.
A continuación pones el papel a descansar con lo escrito boca abajo delante del sahumador. De manera que tendrás la vela encendida, luego el sahumador delante de la vela y el papel delante del sahumador.
Esperas unos diez minutos mirando la vela. En ese lapso de tiempo debes pensar en la persona que quieres enamorar, busca imágenes positivas que te acerquen a él. Piensa en aquellas cosas agradables que podrías decirle o que él podría decirte a ti.
La última parte es la más importante y consiste en la proclamación en voz alta de tu amor hacia la persona que quieres enamorar. Tomas las tres rosas rojas que deben poseer su tallo pero sin espinas (tienes que sacárselas antes con un cuchillo) y las pones en el centro de tu pecho a la altura del corazón mientras las sostienes con tu mano derecha.
Levanta la cabeza y dices en vos alta la siguiente frase: Por medio de este acto declaro mi amor hacia… (Dices su nombre). Mi amor es serio y aquí convoco a la diosa de todas las mujeres enamoradas, para que me ayude.
Esperas un minuto con las rosas en tu pecho y luego las pones sobre el papel.
Dejas que la vela se termine. No hace falta que permanezcas sentada frente a la vela, pero debes cuidar de alimentar el sahumador para que siga activo.
Cuando la vela se acaba, debes tomar el papel y y doblarlo con el nombre de él hacia adentro y guardarlo durante 28 días debajo de tu almohada. El resto de los componentes menos el sahumador y el lápiz labial los arrojas a la basura cuidando que nadie los vea. Luego de los 28 días guardas el papel en tu mesa de luz.
El hechizo es complicado y un poco difícil pero muy efectivo.
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