Hay 7 leyes espirituales antiguas que son muy conocidas en la práctica mística y esotérica. Estas siete leyes son muy antiguas y abarcan a todo el universo. Se hicieron conocidas a todo público en occidente cuando los denominados “3 Iniciados” divulgaron un libro denominado El Kibalyón. En el que se resumen estas siete leyes y se explica en que consiste cada una de ellas. Este libro fue escrito al parecer en el siglo XIX, pero adquirió fama en occidente a partir de la década del 70.
Por lo tanto ha sido libro de cabecera de muchas escuelas filosóficas y muchas doctrinas espirituales. También es un libro de consulta muy importante para cualquier persona que se interese por las prácticas espirituales, ya que las leyes que en él se explican son leyes espirituales que gobiernan a todos los actos de la naturaleza y de los hombres. Quién sepa entender estos siete principios cabalmente estará ante las puertas de un conocimiento superior. Quién sepa además aplicarlas será una persona muy especial, con un conocimiento muy especial.
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Las 7 leyes espirituales:
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La ley del mentalismo:
Esta ley dice que todo es mente y que el universo es una creación mental. Con esto se quiere expresar que el universo fue creado por el pensamiento de un creador y que nosotros como seres humanos vivimos en ese pensamiento. Además todos los objetos y las cosas también son una creación de esa mentalización. Y aunque esto parezca un mito, lo cierto es que hay una vibración en la materia que proviene de una idea y que podemos verlo cuando nosotros mismos creamos algo a partir de una idea. La idea, el pensamiento se antepone a la materia y aquí hay grandes misterios.
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La ley de correspondencia:
Esta ley expresa que como es arriba es abajo y como abajo es arriba. Quiere decir que lo que se encuentra en el cielo también se encuentra en la tierra. Claro que aquí estamos hablando del cielo en sentido metafórico. Lo que está ley está expresando claramente es que lo que se da en un plano superior también se da en un plano inferior. Es decir que lo que se manifiesta, por ejemplo en el plano físico, está conectado con el plano espiritual y viceversa. Todas las partes en el universo se hayan interconectadas y las leyes que hay arriba también las hay abajo. Por eso todo lo que hagamos repercute en los planos superiores y en los inferiores.
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La ley de vibración:
Esta ley dice que todo está en movimiento y que todo está vibrando. Hay grados de vibración pero esta vibración es constante. Está diciendo además que nada está quieto aunque lo parezca. La diferencia entre una piedra y un animal o una gota de agua es tan sólo un distinto grado de vibración. Esta ley habla también de la unidad vibracional que hay en el universo y quién la entienda puede curar a los demás o trasladarse en el espacio y el tiempo modificando los campos vibratorios de su entorno.
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Ley de polaridad:
Esta ley dice que todo en el universo existe en polos y que los polos opuestos se diferencian entre sí porque poseen distinto grado en una escala que los une. Si tomamos por ejemplo el calor y el frio, o la oscuridad y la luz, veremos que unos y otros extremos no son más que graduaciones de una misma cosa. Esta ley permite entender muchos fenómenos del pensamiento y emocionales. Las polaridades existen en todos los mecanismos universales y también al igual que los otros siete principios, en nuestro interior. Esta ley puede usarse para modificar estados internos, es decir que uno puede polarizar sus emociones, sentimientos y pensamientos.
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Ley de ritmo:
Esta ley dice que todo posee un ritmo en la naturaleza. Todo se mueve en forma pendular y a un determinado ritmo. Así como la marea viene y va a un ritmo, las hojas de los árboles se mueven a un ritmo, también todo en el universo posee su ritmo. Algunas cosas tienen ritmos muy fáciles de observar, otras muy difíciles de entender para el humano, como es el ritmo que poseen los planetas o las estrellas. La ley de ritmo puede usarse para prevenir lo que vendrá, sabiendo que a un ritmo le precede otro, además comprendiendo el ritmo de una situación o de algún proceso podremos sincronizarnos con él y producir modificaciones en nuestro entorno.
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Ley de causa y efecto:
Para el esotérico la suerte es un efecto que se produce porque hay una causa desconocida que actúa. Por lo tanto la ley de causa y efecto es la que gobiernan los actos simples y los muy complejos y complicados. Todo movimiento genera una causa y esa causa un efecto, así como cuando tiramos una piedra al agua se generan ondas. Si tenemos sabiduría podremos conocer las causas, si no la tenemos podemos sentir que no hay causas y que todo es producto de la casualidad, pero lo cierto es que aunque no lo veamos la causa sí existió. Como sería el caso, según nuestro ejemplo, de aquel que ve las ondas producidas por la piedra pero no ha visto la piedra caer en el agua.
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Ley de Género:
La ley de género expresa que en la naturaleza todo tiene género, es decir que todo es femenino o masculino. A su vez como dice la filosofía oriental lo masculino tiene una parte femenina y viceversa. Esta ley es muy útil y en oriente se la ha tenido muy en cuenta cuando desde la medicina hasta la alimentación, utiliza la clasificación en yin y yang, o en femenino y masculino. Desde una hoja hasta una galaxia poseen estas dos energías.
Las leyes espirituales son 7 y es mucho lo que se puede investigar en cada una de ellas. Aquí tan sólo una pequeña aproximación al tema. Esperamos te haya servido nuestro artículo.
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